Vasija con Tres Pies

La Vasija con Tres Pies es un recipiente datado aproximadamente entre los siglos IV d.C. y V d.C. (período comprendido entre los años 301 d.C. y 500 d.C.), perteneciente al arte precolombino, en concreto al arte teotihuacán.

Vasija con Tres Pies

Vasija con Tres Pies

Fue hallada durante la década de 1.940 d.C. durante las excavaciones realizadas por los habitantes locales en el pueblo Santiago Ahuizotla, localizado en la Cuenca de México, en México.

También se conoce que perteneció a la colección de la galería de arte Stendahl, ubicada en la ciudad de Los Ángeles (Estados Unidos de América).

En el año 1.955 d.C. la Vasija con Tres Pies fue comprada por el político estadounidense y vicepresidente de los Estados Unidos Nelson Aldrich Rockefeller.

Siendo en el año 1.979 d.C. cedida a la colección de arte del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York (Estados Unidos de América).

Vasija con Tres Pies

Descripción

Tiene una altura de 24,4 cm, una anchura de 25,1 cm y un diámetro de 23,5 cm. 

Está elaborada en cerámica policromada.

Se trata de una vasija cilíndrica cuya superficie fue tallada en bajorrelieve y acentuada con pigmento rojo, además se encuentra sostenida en la base por un total de tres pies robustos con forma cilíndrica.

Alrededor del cuerpo de la vasija hay representados tres iconos que se han interpretado como una especie de construcción, aunque en la actualidad su significado aun permanece sin descifrar.

Vasija con Tres Pies

El motivo se asemeja a un gran tocado de plumas, con un medallón en el centro que ésta coronado con una forma de media estrella sobre un símbolo conocido como "el ojo de reptil".

Cabe resaltar que los investigadores piensan que éstos símbolos pueden representar títulos reales o nombres de lugares en el lenguaje visual de Teotihuacán.

Para finalizar subrayar que los investigadores creen que éste estilo generalizado de vasijas cilíndricas con tres pies robustos y paredes rectas se podría haber originado en la metrópoli de las tierras altas centrales de Teotihuacán.

Así mismo se conoce que las vasijas teotihuacanas se fabricaban en una amplia gama de tamaños, colores y tratamientos superficiales. Aparte se piensa que gracias al comercio se difundieron ampliamente en otras culturas y que muchos alfareros locales las emularon.

Actualmente se encuentra en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, Estados Unidos de América.