Hermes con el niño Dionisio

Hermes con el niño Dionisio, también conocido como Hermes de Praxíteles o Hermes de Olimpia, es una escultura datada aproximadamente entre los años 350 a.C. y 330 a.C., perteneciente al arte griego.

Hermes con el niño Dionisio

Ha sido esculpida por el escultor griego Praxíteles de Atenas.

Fue hallada el 8 de mayo del año 1.877 entre las ruinas del templo dedicado a diosa Hera en la ciudad de Olimpia (Grecia).

En el momento del hallazgo se descubrió el cuerpo (cabeza, tronco, piernas y brazo izquierdo) de una escultura que descansaba contra el tronco de un árbol.

Toda la escultura estaba cubierta y protegida por una gruesa capa de arcilla, lo que ha facilitado que este en un buen estado de conservación.

Sin embargo, fueron necesarias seis hallazgos más y trabajos de restauración, para descubrir el resto de la escultura tal y como se contempla en la actualidad.

Descripción 

Tiene una altura de 213 cm (incluida la base la altura es de 370 cm). Está fabricada en mármol de Paros.

Se trata de una escultura de bulto redondo o exenta que representa la figura de un hombre desnudo  de pie (Hermes) sosteniendo en su antebrazo a un niño (Dionisio).

Hermes con el niño Dionisio

La figura de Hermes destaca por un contraste de texturas y efectos plásticos. La suavidad de la piel (la cara y el torso) contrasta con el cabello rizado.

El pie derecho de Hermes se encuentra unido a un pedazo del pedestal, éste presenta mortajas con grapas que no encajan en la corona de la base (lo que supone que ha habido varias reconstrucciones).

Respecto a la composición destaca por la calidad del modelado, la flexibilidad de las figuras y la delicadeza de las superficies.

Aunque en la parte posterior de la escultura se pueden observar las marcas de la escofina y el cincel, lo que indica que la escultura solamente está parcialmente pulida.

Se puede observar la curva praxiteliana (esta imprime airosidad y ligereza a las figuras) hace que el cuerpo de Hermes se desplace del eje vertical formando una forma de "S" invertida que proporciona un equilibrio entre el movimiento y el reposo.

La elevación de la cadera de Hermes, como consecuencia de la ondulación del torso, junto con la definición de la musculatura hacen que la escultura pierda tensión y gane sensualidad.

Todo esto contrasta con la verticalidad con la que se encuentra representada la figura de Dionisio. Este se encuentra sentado sobre el antebrazo izquierdo de Hermes, se aprecia que con la mano derecha se encuentra tocando el cuerpo de Hermes.

Hermes con el niño Dionisio

El tronco se encuentra unido a la cadera de Hermes por la colocación de un puente. Destaca, la textura rugosa y la caída de la túnica o manto, que junto con el tronco tienen la función de soporte.

Cabe destacar que en el momento del hallazgo el cabello conservaba ligeros rastros de cinabrio (una forma de sulfato de mercurio con un color rojo, una preparación para el dorado).

También se han conservado rastros de cinabrio en las correas de la sandalia del pie original (con rastros de dorado).

La sandalia también lleva el motivo de un dibujo de Heracles (que probablemente fue realizado con pintura).

Toda la escultura descansa sobre una base (pedestal) rectangular fabricada en un bloque de piedra caliza gris entre dos bloques de mármol.

Este conjunto escultórico representa un tema mitológico, el dios Hermes (mensajero de los dioses) toma en su brazo a su hermanastro el dios Dionisio (dios del vino) para entregarlo a las ninfas del monte Nisa, para que estás se ocupen de su crianza.

El estado de conservación es bueno, aunque a la figura que representa a Hermes le falta el antebrazo derecho, dos dedos de la mano izquierda, el pie izquierdo y su pene, en cambio a la figura de Dionisio le falta los brazos (excepto la mano derecha) y el extremo del pie derecho.

Actualmente se encuentra en el Museo Arqueológico de Olimpia, Grecia.