Talismán de Carlomagno

El Talismán de Carlomagno es un relicario datado aproximadamente en el siglo IX d.C. (período comprendido entre los años 801 d.C. y 900 d.C.), perteneciente al arte medieval.

Talismán de Carlomagno

En concreto se encuentra englobado dentro del arte prerrománico y dentro de éste pertenece al arte carolingio.

Cabe resaltar que algunos investigadores piensan que el relicario fue encontrado en el año 1.000 d.C. alrededor del cuello del emperador Carlomagno cuando el tercer emperador del Sacro Imperio Romano Germánico Otón III abrió su tumba en la catedral de Aquisgrán.

Sin embargo según la tradición el relicario fue hallado el 8 de enero del año 1.166 d.C. durante la exhumación del cuerpo del emperador Carlomagno llevada a cabo por el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico Federico I de Hohenstaufen (también conocido como Barbarroja).

Lo primero en lo que coinciden todos los investigadores es que hasta el año 1.804 d.C. formaba parte de la colección de arte del Tesoro de la Catedral de Aquisgrán.

Después el 9 de diciembre del año 1.804 d.C., durante la celebración del "Corpus Christi", el primer obispo de la catedral Marc-Antoine Berdolet regaló el Talismán de Carlomagno a la emperatriz consorte de Francia, reina consorte de Italia y duquesa de Navarra, Josefina de Beauharnais (primera esposa de Napoleón Bonaparte). 

Ésta se lo regaló a su hija la reina de Holanda Hortense Eugénie Cécile de Beauharnais, quién se lo legó a su hijo el emperador de los francés y último monarca de Francia Napoleón III Bonaparte.

Después de la caída del segundo imperio Francés su esposa la emperatriz consorte de Francia y aristócrata española Eugenia de Palafox Portocarrero y Kirkpatrick (también conocida como María Eugenia de Guzmán y Portocarrero o Eugenia de Montijo) confirió el Talismán de Carlomagno al médico y político francés Henri Conneau quien lo escondió en una pared de su casa hasta que pudo ser devuelto a Eugenia de Montijo cuando se reencontraron en Inglaterra.

Talismán de Carlomagno

En el año 1.919 d.C. el Talismán de Carlomagno fue legado al cardenal y arzobispo de la abadía de Reims Louis-Henri-Josep Luçon quién lo depositó en el Tesoro de la iglesia de la abadía de Saint-Remis.

Hasta que en el año 1.927 d.C. que el Talismán de Carlomagno pasó a formar parte de la colección del Museo de Saint-Reims, localizado en la ciudad de Reims, situado en el departamento de Marne (Francia).

Descripción

Tiene una longitud de 7,3 cm. Está fabricado en oro, madera, piedras preciosas (perlas, granates y esmeraldas) y plata.

Se trata de un relicario colgante con forma de bulbo de peregrinación (también conocido como bulbo de elogio), es decir, una pequeña botella plana y redondeada destinada a contener un líquido o un poco de tierra proveniente de los Santos Lugares.

Es conocido que originalmente el relicario contenía el cabello de la Virgen María dentro de un medallón central enmascarado por un zafiro, aunque fue robado después del año 1.870 d.C., se piensa que el cabello de la Virgen fue remplazado alrededor del año 1.804 d.C. por dos fragmentos de madera presentados de forma entrecruzada como una Cruz.

Talismán de Carlomagno

La cruz es visible por medio de un vidrio azul cortado en un cabujón que tiene la función de actuar como una lupa y de sustituir a la piedra original del reverso.

En el anverso queda un zafiro pulido muy irregularmente montado en una hoja e incrustado en el círculo metálico.

Técnicamente el relicario ha sido elaborado mediante oro trabajado en filigrana y granulado, para después montar las cincuenta y tres piedras preciosas sobre la hoja.

Las piedras preciosas han sido colocadas por ambos lados y en los bordes, además destaca la decoración compuesta por perlas, granates y esmeraldas situadas en los cuatro puntos cardinales del relicario.

Para finalizar subrayar que debido a su composición armoniosa y a la disposición de las piedras preciosas según su forma y color hace que el Talismán de Carlomango este considerado una importante obra de orfebrería dentro del arte carolingio.

Actualmente se encuentra en el Museo conocido como Palacio de Tau, en la ciudad de Reims (Francia).