domingo, 9 de septiembre de 2018

Caja de los Guerreros

La Caja de los Guerreros es una pequeña urna funeraria datada aproximadamente en el siglo I a.C. (período comprendido entre los años 100 a.C. y 1 a.C.), perteneciente al arte íbero.

Caja de los Guerreros
En concreto fue elaborada durante el periodo íbero tardío.

Fue hallada en el año 2.010 d.C. durante las excavaciones arqueológicas realizadas en la necrópolis de Piquía.

Localizada en el yacimiento de la Cuesta del Parral, situada en el municipio de Arjona, perteneciente a la provincia de Jaén, en la comunidad autónoma de Andalucía (España).



Descripción


Tiene una altura de 15,5 cm, una longitud de 21 cm y una profundidad de 17,2 cm. Está realizada en piedra caliza, mediante las técnicas de incisión, biselado y tallado.

Se trata de una pequeña urna funeraria con forma de arca que presenta en sus cuatro caras laterales cuatro bajorrelieves con diferentes escenas bélicas: escenas de luchas entre guerreros (tanto guerreros a caballo como guerreros a pie).

Los espacios de las caras se encuentran definidas mediante biselado, además las escenas representadas están enmarcadas mediante un cordón resaltado.
  • La primera cara representa un duelo entre lanceros, se observa como las figuras situada en el centro están representadas desnudas. 
  • La segunda cara lateral muestra una lucha entre un jinete (tiene grandes proporciones, más grandes que el caballo, hasta el punto de arrastrar las piernas) y un personaje desnudo que tiene en las manos una especie de onda o un arco.
  • La tercera cara es la representación de un duelo entre dos guerreros, ataviados con una cinta en la cabeza, un cinturón decorado y una túnica corta. Aparte uno de los guerreros lleva una lanza y el otro lleva una caetra.
  • La cuarta cara representa a dos guerreros a caballo, se puede apreciar como los caballos están representados con las crines trenzadas.

Caja de los Guerreros
En la parte superior de la caja hay una tapadera de un tamaño de 20 cm x 19 cm.

La tapadera presenta una doble línea perimetral y dos diagonales de doble línea cruzados a la altura del pomo (también conocido como botón).

El pomo, cuya funcionalidad es sostener la tapa para cerrar la urna, tiene forma cilíndrica sobre una pequeña basa que está rematada por un doble aro adosado.

Para finalizar subraya que en el interior de la urna se han hallado cenizas de dos personas (un hombre y una mujer) que fueron incinerados según la tradición íbera a menos de 800 grados.

Además en el interior, aparte de las cenizas, también fueron hallados unos pocos fragmentos de huesos de las manos y huesos de los pies.

Gracias a los análisis forenses de los restos llevados a cabo por la Universidad Complutense de Madrid (España), se ha podido determinar que los huesos masculinos corresponderían con un hombre fuerte, de cuerpo atlético, con lesiones y diversas enfermedades.

Lo que ha llevado a los investigadores ha afirmar que el hombre pudo haber sido un guerrero, mientas que los huesos femeninos determinan que la mujer era más joven y poseía un cuerpo grácil (fino y delicado).

Actualmente se encuentra en el Museo Provincial de Jaén, en Andalucía (España).

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