Oso de Porcuna

El Oso de Porcuna es una escultura datada aproximadamente en el siglo I a.C. (período comprendido entre los años 100 a.C. y 1 a.C.), perteneciente al arte íbero.

Oso de Porcuna

Oso de Porcuna

Oso de Porcuna

Se conoce que pudo haber sido realizada por el pueblo Túrdulos (pueblo asentado entre los valles del río Guadiana y el río Guadalquivir).

Fue hallada en el año 1.926 d.C. durante las excavaciones arqueológicas realizadas en el yacimiento arqueológico de Porcuna.

Localizado en la provincia de Jaén, situada en la comunidad autónoma de Andalucía, en España.

Cabe resaltar que antiguamente éste yacimiento arqueológico se correspondía con la ciudad íbera de Ipolca.

Una importante ciudad-estado que durante la época romana fue denominada Obulco y que durante la época árabe fue conocida como Bulkuna.

Oso de Porcuna

Descripción

Tiene una altura de 79 cm, una anchura de 32 cm y una longitud de 70 cm. 

Está fabricada en piedra caliza, mediante las técnicas de incisión y tallado.

Se trata de una escultura de bulto redondo o exenta que representa un oso sentado con la pata delantera izquierda levanta y apoyada sobre una cabeza humana.

Oso de Porcuna

La cabeza humana se encuentra representada con el cabello con mechones curvos.

Aunque no se encuentra en buen estado de conservación todavía se pueden observar los ojos almendrados, las cejas muy marcadas, la boca y las orejas.

Oso de Porcuna

El oso está representado con la boca entreabierta donde se puede apreciar una hilera de dientes y el hocico presenta forma triangular con dos incisiones situadas en la parte delantera.

Los ojos ovalados están muy marcados y la parte superior de la cabeza se encuentra en muy mal estado de conservación, resalta como está el sitio de las orejas pero éstas no han llegado hasta la actualidad.

La escultura se encuentra levantada sobre un herma (un pilar cuadrado o rectangular de piedra, terracota o bronce, sobre el que se colocaba un busto).

Con respecto a la composición destacar que los rasgos físicos del oso se encuentran representados de forma esquemática y geométrica.

Para finalizar subrayar que la escultura del Oso de Porcuna combina el tema clásico del herma (pilastra rematada con una cabeza humana) con la figura de un animal de carácter funerario (característica propia de la cultura íbera).

Actualmente se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional de España, en Madrid.