El Señor de Ozuluama es una escultura datada aproximadamente entre los años 1.200 d.C. y 1.521 d.C., perteneciente al arte precolombino, en concreto al arte huasteca.
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| Señor de Ozuluama |
Cabe destacar que el año del hallazgo es desconocido, pero se sabe que fue encontrado durante las excavaciones arqueológicas realizadas en el municipio de Ozuluama de Mascareñas.
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| Señor de Ozuluama |
Localizado en el estado de Veracruz de Ignacio de la Llave (también conocido como Veracruz).
En México (llamado oficialmente Estados Unidos Mexicanos).
Descripción
Tiene una altura de 166 cm, una anchura de 55 cm y una longitud de 18 cm.
Está fabricado en piedra arenisca, mediante la técnica de tallado.
Se trata de una escultura de bulto redondo o exenta que representa un porta-estandarte.
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| Señor de Ozuluama |
Está representado un personaje que se encuentra siendo devorado por un monstruo con forma de batracio (animal vertebrado anfibio que pasa la primera parte de su vida en el agua y la edad adulta en la superficie terrestre).
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| Señor de Ozuluama |
Los investigadores piensan que el monstruo podría representar un sapo, considerado por los huastecas símbolo de la tierra que devora los cadáveres.
En el rostro redondeado destacan los ojos pequeños almendrados, la nariz mutilada y los labios gruesos.
Aparte tiene grandes orejeras colgantes con forma geométrica en las orejas.
El brazo derecho se encuentra flexionado con la mano derecha apoyada en el pecho, mientras que el brazo izquierdo está estirado pegado al cuerpo.
Se encuentra ataviado con un faldellín decorado con cuadrados y anudado a la cintura, también lleva un pectoral ornamentado con formas geométricas compuestas por: círculos, medias lunas y líneas.
Lo que más llama la atención es que a la altura del pecho hay un hueco circular dónde originalmente podría haber estado colocado una piedra verde.
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| Señor de Ozuluama (detalle) |
Por lo tanto los investigadores piensan que la persona representada podría haber sido un difunto.
Además en la parte posterior hay representada una figura de un sacrificador con el corazón al descubierto.
Resalta como aparece representado con las manos y los pies en forma de garra.
Toda la escultura descansa sobre un pedestal rectangular elaborado en la misma piedra arenisca que el resto de la estatua.
Para finalizar subrayar que el Señor de Ozuluama está considerado una de las muestras de labrado en piedra dentro del arte huasteca más importantes que ha llegado hasta la actualidad.
Actualmente se encuentra en el Museo de Antropología de Xalapa, en México.
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