Máscara Colgante de la Reina Idia |
Se conoce que fue elaborada en la ciudad de Benín (también conocida como ciudad Edo) localizada en el estado de Edo, en el sur de Nigeria.
Perteneció a la colección de arte del primer alto comisionado del Protectorado británico del sur de Nigeria, Sir Ralph Denham Rayment Moor.
Hasta que la Máscara Colgante de la Reina Idia fue comprada en el año 1.910 d.C. por el profesor, médico y etnólogo británico Charles Gabriel Seligman.
Quién la donó en ese mismo año (1.910 d.C.) al Museo Británico de Londres (Gran Bretaña), dónde pasó a formar parte de su colección de arte.
Descripción
Tiene una altura de 24,50 cm, una anchura de 12,50 cm y una profundidad de 6 cm. Está fabricada en marfil de elefante, aleación de cobre y hierro, mediante las técnicas de incrustación, grabado y tallado.
Se trata de una máscara colgante hueca con forma larga y ovalada que se encuentra finamente tallada llegando a ser semiopaca y que representa a la reina Idia.
Cabe destacar que las características faciales de la máscara son simétricas y precisas, los labios carnosos están separados y las fosas nasales ligeramente acampanadas.
Encima de la cabeza tiene una tiara compuesta por un total de once figuras que representan la cabeza de comerciantes portugueses, aunque en la actualidad una de las figuras se encuentra mutilada.
Los comerciantes están representados con el pelo largo, bigotes colgantes y con sombreros en la cabeza que han sido realizados mediante el uso de un aro de aleación de cobre.
Máscara Colgante de la Reina Idia |
El cabello denso está representado con pequeñas espirales y una línea de cabello rectilínea.
Sobre las cejas hay un total de cuatro marcas de escarificación talladas, mientras que en el frente hay dos marcas verticales grabadas con incrustaciones de hierro.
Los ojos almendrados presentan incrustaciones de hierro alrededor, aparte las pupilas están realizadas también mediante incrustaciones de hierro.
Se puede observar como hay un total de cuatro escalones en cada lado de la máscara, situados arriba y debajo de cada oreja, que permiten que la máscara pueda ser colgada en suspensión.
En la parte inferior, situado debajo de la barbilla se aprecia como lleva un collar compuesto por un enrejado de celosía abstracto con incrustaciones de cobre.
Para finalizar en cuanto a la composición resalta el naturalismo y la expresión de frialdad impersonal de la máscara que refleja las convenciones estilísticas propias de los tallistas de marfil de la ciudad de Benín.
Actualmente se encuentra en el Museo Británico de Londres, Gran Bretaña.
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