Madonna de Brujas

La Madonna de Brujas es una escultura datada aproximadamente entre los años 1.501 d.C. y 1.504 d.C., perteneciente al arte renacentista. 

Madonna de Brujas

Fue esculpida por el arquitecto, escultor y pintor italiano Michelangelo Buonarroti (también conocido como Miguel Ángel).

La escultura fue comprada por un precio de 4.000 florines por Giovanni Moscheroni y Alessandro Moscheroni, pertenecientes a una rica familia de comerciantes de telas de la ciudad de Brujas (Bélgica).

Cabe destacar que es conocido una serie de correspondencia (cartas) enviadas desde la ciudad de Roma en el que dan instrucciones precisas para el trasporte de la escultura a la ciudad de Brujas (Bélgica).

En el año 1.794 d.C. durante la Revolución francesa los franceses que habían invadido Bélgica se llevaron la escultura junto con otras obras de arte.

La Madonna de Brujas regresó a la ciudad de Brujas en el año 1.815 d.C. después de la derrota de Napoleón I Bonaparte.

Después en el año 1.944 d.C. fueron los soldados alemanes quienes se llevaron la escultura camuflada en un colchón en un camión de la Cruz Roja.

Fue hallada en el año 1.945 d.C. en el interior de una mina de sal en la localidad de Altaussee, localizada en el distrito de Liezen, en el estado de Estiria (Austria), junto con otras muchas obras de arte que habían sido saqueadas por toda Europa.

Madonna de Brujas

Por lo tanto en el año 1.945 d.C. la Madonna de Brujas fue devuelta y depositada en la Iglesia de Nuestra Señora de la ciudad de Brujas, en Bélgica.

Descripción

Tiene una altura de 1,28 metros. Está fabricada en mármol de Carrara, mediante la técnica de tallado.

Se trata de una escultura de casi un tamaño natural que representa la figura de la Virgen María y el Niño Jesús.

La Virgen se encuentra representada en posición sedente, ataviada con una túnica de cuello alto, mangas largas y numerosos pliegues. También lleva un velo ondulado que le enmarca el rostro.

Madonna de Brujas

En el rostro alargado y ovalado destacan: los ojos almendrados semicerrados mirando hacia abajo, la nariz recta, los labios finos y el mentón redondeado. 

Cabe resaltar que muestra una expresión de tristeza y serenidad.

La mano derecha de la Virgen reposa sobre su rodilla derecha, mientras que la mano izquierda sujeta ligeramente al Niño Jesús.

El Niño Jesús aparece representado en un tamaño desproporcionado, desnudo, en posición de pie entre las rodillas de su madre y envuelto entre los pliegues de la túnica de la Virgen. 

Madonna de Brujas

Se observa como apenas tiene apoyo destacando tanto su naturaleza divina como humana. 

Está sujeto ligeramente por la mano izquierda de la Virgen María y parece como si estuviera representado a punto de alejarse de su madre y caminar por el mundo.

Toda la escultura reposa sobre una base circular realizada del mismo mármol de Carrara que el resto de la escultura. 

Aparte la Madonna de Brujas se encuentra situada en el interior de la capilla de la Iglesia de Nuestra Señora, en una estructura cuya parte superior está adornada con una cúpula ornamentada con un motivo de concha que simboliza la fertilidad y virginidad de la Virgen María.

Para finalizar subrayar que la Madonna de Brujas fue concebida para ser contemplada desde la izquierda, así desde éste punto de vista se pueden apreciar como la mirada de la Virgen María se dirige al espectador y el tamaño desproporcionado en la representación del Niño Jesús (destacando sobretodo la representación de la cabeza en un tamaño un poco más grande).

Actualmente se encuentra en la Iglesia de Nuestra Señora de la ciudad de Brujas, en Bélgica.