La Jarra con Mujeres Danzantes es una jarra datada aproximadamente entre los siglos VI d.C. y VII d.C. (período comprendido entre los años 501 d.C. y 700 d.C.), perteneciente al arte persa, en concreto al arte sasánida.
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| Jarra con Mujeres Danzantes |
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En el año 1.965 d.C. la jarra fue adquirida por los marchantes de arte iraníes y coleccionistas de arte Nuri Farhadi y Habib Anavian, pasando a formar parte de su colección ubicada en la ciudad de Nueva York (Estados Unidos de América).
Hasta que en el año 1.968 d.C. la Jarra con Mujeres Danzantes fue comprada por el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York (Estados Unidos de América), dónde pasó a formar parte de su colección de arte.
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Descripción
Tiene una altura de 34 cm. Está fabricado en plata y dorado con mercurio.
Se trata de una jarra formada por un pie ancho que funciona como base, un tallo ornamentado con un medallón con decoración en relieve, con un cuerpo ovulado totalmente ornamentado, con el pico y cuello lisos y un asa unida al cuerpo mediante dos remaches (uno situado en la parte superior y el otro colocado en la parte inferior) con forma de animal y un adorno con forma redondeada colocado en la parte superior del asa.
El cuerpo está ornamentado con una serie de arcos florales sostenidos por pilastras bajas que enmarcan cuatro figuras femeninas danzantes. Cada una de éstas figuras sostiene un objeto ceremonial en cada mano: ramas de uva y hojas, un vaso y una flor en forma de corazón.
Además se observa como debajo de una arcada, los pájaros picotean la fruta y debajo de otra una pequeña pantera bebe de una jarra.
Con respecto a la composición resaltar que tanto las mujeres como sus motivos decorativos recuerdan representaciones de las ménades (seres femeninos divinos relacionados con el dios Dionisio).
Sin embargo enfatizar que algunos investigadores han sugerido que éstas figuras femeninas se han adaptado al culto de la diosa Anahita (diosa de la fertilidad, la salud, la curación y la sabiduría).
Pero no sobreviven textos que expliquen la apariencia o función de éstas figuras femeninas, no obstante lo más probable es que éstos recipientes ornamentados con motivos como éstos hubieran estado destinados a contener vino para celebraciones de la corte o festivales religiosos.
Para finalizar subrayar que las vasijas de plata sasánidas tardías, en particular las botellas y las jarras, a menudo se encontraban decoradas con figuras femeninas que sostenían una variedad de objetos festivos.
Siendo la apariencia de estos motivos da testimonio de la influencia continua de la imaginería griega asociada con el dios Dionisio (dios del vino, la agricultura, el teatro, la fertilidad, la locura y el éxtasis).
Actualmente se encuentra en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, Estados Unidos de América.
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