La Bella Chocolatera

La Bella Chocolatera, también conocida como La Muchacha Vienesa del Chocolate, es una pintura datada aproximadamente entre los años 1.743 d.C. y 1.744 d.C., perteneciente al arte rococó.

La Bella Chocolatera

Fue pintada por el pintor y dibujante suizo Jean-Étienne Liotard.

Además destacar que lo más probable es que la pintura fuera pintada en diciembre del año 1.744 d.C., puesto que el pintor permaneció hasta ese año en la ciudad de Viena (Austria), a petición de la emperatriz María Teresa I de Austria.

El 3 de febrero del año 1.745 d.C. la pintura fe comprada en la ciudad de Venecia (Italia) por el erudito, escritor, ensayista y coleccionista de arte italiano Francesco Algarotti, quién se encontraba en Italia en nombre del rey de Polonia Augusto III de Polonia.

En el año 1.747 d.C. la pintura fue expuesta al público en el Stallhof-Johanneum (en la actualidad Museo del Transporte de Dresde), Alemania.

El 25 de septiembre del año 1.855 d.C. la pintura fue trasladada a la "Sempergalerie, Königliche Gemäldegalerie" (Pinacoteca Real), es decir, la pintura fue trasladada al edificio Semper el "Nuevo Museo Real de Dresde" (Alemania).

Durante la Segunda Guerra Mundial, el cuadro fue trasladado a las cámaras de la fortaleza del municipio de Königstein, en el estado federado de Sajonia (Alemania) para protegerlo de los bombardeos.

Después de la invasión del Ejército Rojo (también conocido como Ejército Rojo de Obreros y Campesinos), la pintura fue localizada y llevada junto con otros tesoros artísticos almacenados a la Unión Soviética, de dónde regresó en el año 1.955 d.C..

A partir del año 1.958 d.C.  el edificio Semper el "Nuevo Museo Real de Dresde" (Alemania), fue designado como "Gemäldegalerie Alte Meister", edificado en la ciudad de Dresde (Alemania), siendo desde en ese mismo año, 1.958 d.C., cuando La Bella Chocolatera pasó a formar parte de su colección de arte.

Descripción

Tiene una altura de 82,5 cm y una anchura de 52,5 cm. Está pintada con la técnica pastel sobre pergamino.

Se trata de de una pintura que representa a una joven vienesa, una doncella, llevando una bandeja japonesa lavada en un color oscuro con pequeños pies, con un vaso de agua y una taza de chocolate caliente decorada con motivos florales.

En el rostro descatan las cejas pobladas, los ojos almendrados ligeramente entornados, la nariz recta, los labios carnosos, los pómulos marcados con un ligero toque de rosado y el mentón redondeado.

Está ataviada con una falda gris plateada sobre la cual lleva un delantal de lino blanco atado con un lazo delante del estómago. Se aprecia como la falda tiene forma de campana formada por varias enaguas.

La cintura estrecha es creada mediante la utilización de un corsé que contrasta con la forma de campana de la falda. También lleva una chaqueta de terciopelo marrón dorado con volantes en la parte inferior de la espalda. 

Aparte las mangas de la camisa blanca sobresalen ligeramente por debajo de los puños de la chaqueta y sobre el pecho lleva cruzado un pañuelo blanco, con el que cubre su escote.

Su aspecto elegante se complementa con un zapato de color crema claro y un tocado compuesto por un gorro de seda rosa adornado con delicado encaje blanco y ornamentado con cintas de seda azul.

La joven se encuentra representada frente a una pared monocromática, con fondo claro casi sin sombras, posiblemente un pasillo secundario utilizado por los sirvientes para no molestar a los caballeros.

Con respecto a la composición destacar que la pintura se encuentra trabajada en medios tonos, con gradaciones de luz imperceptibles y de relieve perfecto.

El vaso de agua en la bandeja no sólo magnifica la decoración en el borde de la bandeja como una lupa, sino que también reproduce fielmente el ligero desplazamiento de la decoración ampliada, provocado por la refracción de la luz.

Asimismo, la parte de la mano detrás del vaso de agua se muestra en una imagen físicamente correcta y la cruz de la ventana de la pared opuesta se refleja en el cristal.

Para finalizar subrayar que del 28 de septiembre del año 2.018 d.C. al 6 de enero del año 2.019 d.C. tuvo lugar una exposición especial de las Colecciones Estatales de Arte de Dresde, siendo La Bella Chocolatera expuesta con el título "El pastel más bonito que jamás hallas visto".

Actualmente se encuentra en la Gemäldegalerie Alte Meister de Dresde, Alemania.